
¿Cuál es mi principal problema con Oblivion? El joven director ha querido incluir en su cinta todos y cada uno de los recursos que la ciencia ficción ha usado en iteraciones pasadas hasta el cansancio, con resultados diversos claro está. A primera vista podemos ver, obviamente, que la historia nos enmarca en un mundo post-apocalíptico después de un desastroso contacto extraterrestre. Esto es solo el principio, más adelante vamos encontrando una cantidad inconcebible de subtramas cubiertas por elementos ficticios, que pronto se convierten en una masa sin forma llena de huecos que no solo termina por desparramar la trama principal por doquier, sino que pierde inmediatamente la poca esencia original narrativa que pudimos haber encontrado en la historia de Kosinski. Varias giros de tuerca cerca del final terminarán por matar por completo al guión.
A pesar de que los personajes de la historia son pocos, esto no impide al equipo de Kosinski en moldearlos también como una masa que solo habla y recita unas líneas. Tom Cruise, por supuesto, es con quien deberíamos empatizar, desgraciadamente, su barata fascinación por la Tierra no es mas que un burdo intento de los guionistas por tratar de que el público se sienta identificado por este sentimiento. Olga Kurylenko, quien juega un papel ¿importante? en la trama, aparece hasta después, pero no se sorprendan si realmente no pasa nada con ella, su figura se limita a saltar por ahí una que otra vez para una que otro escena romántica.
Quien pudo haber dado un poco de esperanza a la película, también resulta un refrito más de personajes que ya hemos visto decenas de veces. Morgan Freeman interpreta a Malcolm, el hombre sabio y misterioso que mostrará la luz a Jack y que cambiará su vida para siempre. Su aparición en la historia se limita a unos 5 minutos aproximadamente.
¿Qué más hay que decir? Duncan Jones debería sentirse ultrajado y todos los fanáticos de Kubrick no podrán mas que ofenderse al ver Oblivion.
Lo único que puedo destacar de la cinta es el diseño de producción, que si lograron ver alguno de los featurettes donde podemos ver cómo el equipo de producción insertó los esplendorosos cielos que rodean la torre, cómo construyeron una nave burbuja en tamaña real y cómo hicieron una cabina aparte para simular los abruptos giros del vehículo, seguramente acabarán igual de fascinados que yo. Lástima por el gran trabajo que se hizo.
Quizá también de la música se pueda sacar algo. Compuesta por Anthony Gonzalez bajo el nombre de su banda M83 y Joseph Trapanese, esta logra evocar grandes momentos de majestuosidad pero ¿donde queda el toque M83? este se puede escuchar en apenas pocos esbozos durante toda la cinta. Creo que lo más apropiado para Gonzalez debió haber sido poner su nombre, y no el de la banda, en el proyecto. El tema principal de la película del mismo nombre, deja mucho qué desear.
Ya por última quisiera resaltar la extrañeza de que David Fincher, William Monahan (Los Infiltrados) y Michael Arndt (Pequeña Miss Sunshine) hayan estado involucrados con esta cinta, su calidad los precede; sin embargo, su mano no se nota para nada. No es hasta que veo el nombre de Karl Gajdusek (Trespass) que comprendo la fragilidad del guión.
Kosinski ya planea junto a Disney una nueva entrega de Tron, veremos qué sale de este tercer intento del director.