A Novocaine: Sin Dolor (Novocaine, 2025) al menos hay que agradecerle por haber intentado cambiarle un poco al concepto de un tipo contra todo el mundo incorporando el curioso detalle de que su protagonista es alguien que no puede sentir dolor debido a una condición genética; sin embargo, la forma en que lo desarrolla resulta la más genérica y aburrida posible. Fuera del gore, estamos ante una comedia de acción como cualquier otra que repite los clichés que ya conocemos de pies a cabeza.
Jack Quaid interpreta a Jack Quaid ―como por quinta vez en los últimos años― en una película que comienza como una comedia romántica. Aquí tenemos que aplaudir la presencia de Amber Midthunder, quien por fin vuelve a aparecer en un proyecto cinematográfico de alto perfil tras su salto a la fama con la última entrega de Deprededor. Aunque tiene pocas escenas con Quaid, la química es aceptable, y sí que tenía potencial para algo más interesante. Desafortunadamente, Amber desaparece por un largo rato, y solo hasta el final la volvemos a ver activamente, cuando ya es demasiado tarde.

Domain Entertainment
Volviendo a Quaid, el actor sí que tiene cierto carisma natural, y el papel de Novocaine se ajusta a la perfección a su personalidad, aunque también provoca que ya esté fuertemente encasillado. No hace mucho lo vimos como un tipo ordinario con inclinaciones perversas en Compañera Perfecta (Companion, 2025); y como un cuate normal con poderes extraordinarios en The Boys (2019 – ); y así podríamos seguir. En suma, todo alrededor de esta cinta apuesta a la segura y replica más o menos lo que vimos en la también irreverente Manos a las Armas (Guns Akimbo, 2019), donde Daniel Radcliffe interpreta a un individuo común y corriente que debe enfrentar a unos criminales con unas pistolas atornilladas a sus manos.
Otro aspecto muy criticable de la película es la subtrama que sigue a dos detectives tras el rastro de Novocaine. Sus escenas se sienten forzadas, y estos como personajes no contribuyen a la trama; al final solo son utilizados como accesorios para que la historia pueda concluir. Los demás tampoco se destacan en ningún sentido; Ray Nicholson interpreta a un villano de papel, mientras que Jacob Batalon trata sin éxito de aportar más alivio cómico. Un poquito más de agencia no les hubiera venido mal.

Domain Entertainment
Novocaine es una suerte de anti John Wick que busca explorar los secretos que esperamos ansiosamente poder revelarle alguien a través de la disparatada existencia de su bonachón pero imbatible protagonista. Estamos ante un héroe de acción inusual incrustado en una cinta ordinaria que se estanca bastante, que dura demasiado y que se torna repetitiva demasiado pronto. Lo más rescatable son algunas secuencias de acción y cuando inesperadamente se transforma en Mi Pobre Angelito (Home Alone, 1990).