“Donde hay secretos hay vergüenza”, le dice Eibhlin (Carrie Crowley) a la pequeña y tímida Cáit (Catherine Clinch), la sobrina que acoge en su casa mientras su prima, la madre, está ocupada dando a luz por enésima vez. A pesar de que esta última suele hablar solo para lo necesario, sus escasas palabras albergan siempre